Los ricos no piden permiso
La serie se centra en los patrones y los empleados de Santa Elena, una gran estancia que está bajo el mando matriarcal de Angélica Cerviño (Norma Aleandro). Los Villalba tienen que pasar por situaciones de dolor, amor, conflicto, poder y tristeza durante toda la historia. La alegría se efectua cuando ocurre la boda del hijo menor de la familia, Agustín (Gonzalo Heredia), el cual se casa con su novia Josefina (Eva de Dominici) en la estancia. Al día siguiente, toda la estancia se verá afectada en una espantosa tragedia: la muerte de Angélica, la cual después de discutir por un testamento de su difunto marido, es misteriosamente encontrada muerta. Su muerte se pensó que fue un suicidio, pero el verdadero misterio comienza cuando el comisario del pueblo revela que fue un asesinato.